Resumen
La atención prehospitalaria es cada vez más reconocida en todo el mundo como una parte fundamental en el sistema de salud, sin embargo, no se le da mucha importancia en cuanto al control de infecciones. Para evitar que las ambulancias sean un foco de trasmisión, se deben implementar protocolos de limpieza y desinfección para disminuir las cargas bacterianas, ya que las ambulancias cuentan con dispositivos médicos que están en contacto con el paciente, y si estos no reciben la limpieza adecuada, se convierten en alto riesgo de infección; además se debe tener en cuenta que no siempre hay la información clara de si el paciente puede tener algún tipo de enfermedad infectocontagiosa, o incluso los profesionales de la salud algunas veces pueden padecer algún tipo de patología o han estado expuestos a pacientes quienes son posibles portadores de microorganismos, y al momento de realizar el traslado de ellos, estos patógenos se pueden propagar, lo cual es un evento adverso que atenta contra la seguridad del paciente y el mismo equipo sanitario, ya que estas infecciones podrían llevar a estancias hospitalarias innecesarias, o incluso a la muerte. Son pocos los estudios que se han realizado sobre estos factores de riesgo que están presentes en el transporte asistencial, por lo tanto, se considera un reto mundial para combatir esta exposición biológica.